Gekkouha
La flor de la luz de la luna
Escrito por: Maru de Kusanagi
Disclaimer: Bleach y todos sus personajes no me pertenecen. Ojala fueran míos. Esto está escrito por una fan para otros fans, y no pretende ofender a nadie.
Advertencias del capítulo: yaoi, parejas extrañas, flurry, universo alternativo y escritora loca. Acento rioplatense.
Parejas: principalmente Renji/Ichigo, pero habrán más (irán apareciendo a lo largo de los capítulos, si leyeron la versión en inglés, ya deben saber).
Clasificación:M (habrá lemons).
Nota: regresamos al tiempo presente. Acá seguimos la línea temporal y vemos que pasa cuando Renji e Ichigo se reencuentran. Por cierto, en esta historia, Karakura, Soul Society/Seireitei y Rukongai son lugares en un mismo plano de existencia. O sea, esta Soul Society, que es rodeada por Rukongai y después esta Karakura, sin separación de planos espirituales.
~Terminología para esta historia~
Semi-humano: una persona mitad animal, como los nekobito.
Neko: gato en japonés.
Nekobito: significaría algo así como “persona gato”, y es la unión de las palabras japonesas “neko” y “hito” (persona), y es una palabra que inventé.
CAPÍTULO 5:
Otro día se levanto sobre Karakura. Cazar Hollows era parte de su tarea como shinigami, y normalmente Renji disfrutaba gastar su energía extra en esta actividad, especialmente cuando le evitaba el papeleo. Sin embargo, esta vez no tenía ganas. Haber dejado al gatito naranja solo en casa lo ponía de mal humor.
“¡Despertate!· dijo Rukia, dándole un golpe en la cabeza “¿Qué te pasa hoy? Estar todo melancólico no te es normal...”
“Perdón, me parece que estoy aburrido...”
“¿Porque no podes estar en casa con el minino?”
“¿Qué-? Cállate.”
“Decime, ¿ya hiciste algo con él?”
“¿Qué? ¡No te voy a contar eso!” Renji sintió un rubor inesperado.
“¡Así que si!”
“¡No! Digo, no te voy a decir nada porque sé qué vas a hacer con la información.”
“Dale, ¿hace cuanto nos conocemos? Puedo guardar un secreto.”
“Sí, sólo para compartirlo con las locas de la Asociación de Mujeres Shinigami.”
Rukia rezongó, “Sos malo.”
“Si, si.”
Sus celulares sonaron al fin, y Renji estaba agradecido por ello.
Karakura era un pueblo en las afueras de la Soul Society. Estaba mayormente poblado por shinigamis retirados o despedidos (como Urahara), humanos (como Masaki) y semi-humanos (los nekobito, como Ichigo, Toushirou e Ishida, eran una de las razas clasificadas en esta clase-sí, ¡van a haber más!). Por estas razones, proteger Karakura era un trabajo muy importante.
“Pero, ¿sabés?” dijo Rukia mientras caminaban al punto que indicaba el mensaje “a Ichigo en verdad le gustas. Usualmente es muy salvaje y arisco, solamente s ele acerca a la gente por el trabajo, y nunca comparte nade personal. Siempre lo vi como un chico muy solitario, aun cuando siempre está con su hermano.”
“¿Te referís al gato blanco?” la imagen de los filosos ojos verdes, brillando con un aura fría, vino a la mente de Renji.
“Ah. ¿lo conociste?” observo ella y el solo gruñó “Ése es Toushirou, y es un nekobito, como Ichigo. Pero él eligió vivir el resto de su vida como un gato. También escuche que es mayor que Ichigo.”
Llegaron a un lugar del bosque donde se abría un claro. Había pruebas de una vieja construcción humana, derruida por el tiempo. Algunas aves cantaron en las ramas, anunciando la aparición de los extraños.
“¿Qué dice la información?”
“Dice que es acá.”
Renji desenvaino sus zanpakutou, pero algo no estaba bien. En lugares como este donde no había ni un alma cerca merodeaba, ¿por qué un Hollow iba a aparecer ahí?
“Creo que hay un viejo templo por allá.” Apuntó Rukia tras los arboles “Siento que hay algo ahí.”
“Vamos.”
Caminaron con los sentidos alertas hasta que llegaron a la estructura de piedra de un templo shinto. En la puerta de entrada se leía Tskumine (1). Hierba salvaje cubría casi todo el suelo, pero dentro del lugar esta sorprendentemente limpio.
“Alguien vive acá.” Indico Renji “Tal vez eso es lo buscan los Hollows.”
Renji vio movimientos en las sombras, algo se agazapaba en la oscuridad. Hizo shunpo y atrapó a la criatura que chillaba y se resistía para liberarse. Le llevo a la luz: era pequeño y se veía humano.
“¿Qué encontraste?” se acerco Rukia “Un salvaje...” dijo, viendo con curiosidad al pequeño niño que había atrapado Renji. Era un nekobito salvaje, atigrado gris en la cola y las orejas, y unas ropas desgarradas cubrían su desnudez.
“¿Qué hacemos? Todos los salvajes deben ser entregados.”
El niño pataleó, pateando y rasguñando. Rukia sintió lastima por él.
“Nuestra misión es atrapar el Hollow, no gatos salvajes.”
“Tenés razón.” entonces, una energía emanó del gatito. En un movimiento extraordinariamente veloz, el nekobito mordió fuerte la mano de Renji, haciéndole sangrar. Esto lo tomo por sorpresa, y por ello lo soltó.
“¡Pendejo de mierda!” su mano sangraba profusamente.
“¡Renji, cuidado!”
El pequeño nekobito los miro con ojos ardientes de odio. Una aura maligna se elevaba de él, estaba poseído. Su forma cambio, con las piernas y brazos alargándose. Su rostro cambió completamente a unos monstruoso con grandes dientes y colmillos largos. Entonces, apareció la máscara.
“¡El Hollow se estaba ocultando en el cuerpo de ese chico!” dijo Rukia, sorprendida “Pero, ¿por qué?”
“Estúpidos shinigamis...·”aulló el Hollow “Metiéndose con mi caza... casi lo agarro...”
Era pequeño, pero muy rápido. Dentro del templo, esa cosa se escondió en las sombras, y apareció en las espaldas de Renji, y le mordió el hombro derecho.
“Bastardo” Renji trato de aferrar a Zabimaru, pero la mano le dolía y la sangre hacia la empuñadura resbalársele.
Rukia le atacó, tumbando en el proceso una de las viejas paredes del templo.
Renji se levantó, pero un movimiento en su espalda le llamo la atención. Fue solo un segundo, y cuando trato de enfocarlo, ya había desaparecido. El ruido de la lucha le hizo ir al lado de Rukia.
“¿Estás bien?” le pregunto ella.
“Sí... no sé por qué me sangra tanto la mano...”
“Debe ser la saliva del gato, funciona como un anticoagulante en ciertos casos, como la mordida de un murciélago.”
Rukia saltó y finalmente corto la cabeza del Hollow. Después de esto, fue al lado de Renji y le vendo la mano herida.
“¿Cómo pudiste bajar la guardia así?”
“Hey, ¡no me dijiste que podían hacer esto!”
“¡Es sentido común! Nunca debes bajar la guardia, aún ante un niño que parece inocente.”
“No estás ayudando, ¿sabías?”
Rukia termino de vendar sus heridas. “Debemos ir donde le escuadrón cuatro, ellos van a saber qué hacer.” Y, tal vez, descubramos porque un Hollow aparecería en un lugar desierto como éste.
“¡Shirooooooooooooooooooooooooo-chan!”
Momo abrazo al gato blanco contra su cara.
“¡Soltame!” grito el gato, luchando por soltarse.
“¡Te extrañe!” dijo Momo, ignorando sus reclamos.
“¡Che! ¡Te dije que me sueltes!”
A Toushirou le gustaba esa chica, aunque nunca iba a admitirlo. Momo era alguien que actuaba sin pensar, pero era demasiado “tocadora”. Toushirou se sentía a salvo cuando Momo lo abrazaba, le hacía recordar a alguien de su vida pasada. Tristemente, las similitudes entre esas dos personas terminaban ahí.
Momo lo abrazo extra fuerte una última vez antes de soltarlo.
“Momo-chan, que linda sorpresa.” Dijo Urahara con su usual cara adormilada.
“Hola, Urahara-san,” Ella se inclinó “¿está Ichigo?”
“Sí, está adentro, hoy no fue a lo de Abarai-san porque no se sentía bien.”
“¿Está enfermo?”
“Nah. Está en el comedor.”
En realidad, Ichigo no quiso ir porque extrañaba a Renji, e ir ahí solo lo iba a deprimir más. Después de conocer al gato negro en lo de Kuchiki, sentía más la necesidad de estar con el pelirrojo. Y eso lo estaba matando.
“¡Dale Ichi! ¡Parecía que el mundo estuviera por terminársete!” dijo Yoruichi al chico “Momo vino y te quiere hablar.”
“No tengo ganas.” Dijo él, dándole la espalda. Ella lo pateó.
“¡Momo, dice que te va a ver!”
Ichigo se volvió a ver a la mujer morena con ira. Momo entonces apareció con su amplia sonrisa, y segundos después fue seguida por la silenciosa figura de Toushirou.
“Hola Ichigo-kun. ¿Te sentís mejor?”
Ichigo se sentó derecho y se rascó detrás de la oreja.
“Sí.”
“¡Bien! Rukia me mandó a decirte que Renji volvió,” los ojos de Ichigo se iluminaron, haciendo que Yoruichi se riera por la bajo y a Toushirou gruñir. Ichigo, viéndose descubierto, bajo la cabeza y se ruborizó “pero ahora está en la división medica...”
“¡¿Qué!” casi grito Ichigo “¿Por qué? ¿Qué le pasó?”
“Sólo unas lastimaduras que no son nada graves, pero ella pensó que era lo mejor era... decirte...” y estaba en lo correcto, pensó Momo para sus adentros.
Ichigo se levantó, ¡necesitaba verlo!
“Gracias, Momo. ¡Urahara-san!”
“¿Qué? No hagas tanto ruido.” Dijo el dueño de la tienda.
“Debo ir a la división medica.”
“¿Qué? ¿Por qué?”
“Yo... ¡necesito algo!
Urahara lo miró. El chico gato estaba todo colorado y emocionado, mostrando una emoción más que su usual soledad y rezongo crónico en la cara. Era un buen cambio.
“Vas a limpiar el baño por una semana.”
“¡Gracias! ¡Vamos, Momo!”
“¡Sí!”
“¡Espérenme!” grito Toushiro, saltando y agarrándose del hombro de Ichigo. Los tres pronto desaparecieron.
“¿Le vas a dejar irse así nada más?”
Yoruichi se sentó frente a Urahara en su forma gatuna.
“Bueno, los chicos crecen.”
“¿Aunque te estés muriendo de ser el dueño de su cariño.”
Urahara no respondió a esto.
Llegaron a la División Medica (las barracas del Escuadrón Cuatro) justo para ver a Renji salir con Rukia. Ichigo se detuvo a unos pasos frente al pelirrojo. De pronto, no sabía qué decirle. Estaba preocupado y feliz de verlo sin mayores heridas, pero no podía decir nada de esto porque se dio cuenta que él y Renji no eran nada más que un cliente y su sirviente. Y eso le dolía.
“¡Hola Ichigo!” dijo Rukia al gato naranja “Parece que Momo llevo mi mensaje a tiempo.”
Viendo que Renji no iba a hacer nada, ella puso su mano en el hombro lastimado, haciéndolo gritar de dolor.
“¡Abarai -san! ¿Está bien?” dijo Ichigo, al fin acercándose.
“Si, solo me duele un poco...”
“Así que está vivo. Qué buena suerte tenemos...” siseó Toushirou, saltando del hombro de Ichigo. Renji le clavo los ojos al gato.
“Ne, Momo, ¿querés ir a tomar algo?” pregunto Rukia “Tengo que escribir el reporte y necesito ayuda. Podés traer a Shirou-chan.”
“¡Es Toushirou!” grito el gato blanco. Las dos lo ignoraron.
“¡Excelente! Pero, ¿y ellos”
“Ichigo puede acompañar a Renji a su casa, ya que Unohana-taicho le dio dos días de reposo.” Respondió Rukia con la misma inocencia fingida.
“¡Ok! Vamos, Shirou-chan.” Dijo Momo, agarrando al gato.
“Hey, ¡déjenme! ¡¿Quién dijo que iba a ir con ustedes?!”
Las dos los dejaron, llevándose al sobre protector gato con ellas.
Ichigo camino con Renji hasta su casa, y entonces preparo algo de té. Renji se sentó en la mesa del comedor y admiro cuan limpio estaba todo. Era muy distinto al lugar que había dejado hacia unos días.
“Aquí tienes.” Ichigo sirvió el té.
“Gracias. Hey, ¡este lugar se ve genial! Hiciste un gran trabajo.”
Ichigo se sintió orgulloso y un ruborcito le pinto las mejillas.
“Gracias.”
Ichigo notó que Renji tenía problemas con sostener la taza y decidió ayudar.
“¿Puedo?”
“Sí.”
Ichigo retiro los vendajes con cuidado hasta que la herida estuvo al descubierto. Las marcas de los dientes eran visibles y las heridas no habían cerrado todavía. Ichigo sintió el calor de la fuerte y callosa mano en la suya, era una mano muy acostumbrada a la lucha. También notó que era más grande que la suya “Creía que los shinigami se curaban rápido.”
“Fue un nekobito.” Oyendo esto, las orejas de Ichigo se levantaron, mostrando que estaba interesado en el tema “Un Hollow se estaba escondiendo dentro del cuerpo de uno muy joven... Unohana-taicho dijo que la saliva retrasa la curación. Pero no se detiene ahí, afecta todas la heridas que el cuerpo tenga hasta que su efecto pase. Esa mordida de Hollow tampoco se cura.”
“Hay solo un antídoto para esto...” Ichigo se ruborizo más fuerte “si me dejas...”
Renji lo miro al gato a los ojos y le dejo hacer. Ichigo llevo la mano a su cara y la lamió.
“¡¿Qué estás haciendo?!” Renji recupero su mano. Ichigo bajo las orejas, sintiéndose avergonzado.
“Cuando... cuando uno de mi clase, un nekobito, muerde a alguien en una manera defensiva, su saliva tiene el efecto anticoagulante en la herida; es una forma de defensa y también una herramienta de caza y muerte. Pero también sirve como un bálsamo curativo si ese es el deseo del gato. Puede dar un efecto de neutralización a una herida hecha por otro nekobito...”
“Ya veo...” Renji miró su mano, donde Ichigo la había lamido ya estaba curándose “Es como un tipo de kidou.”
Ichigo espero con ansiedad ver qué hacia Renji. Renji observó al chico, todo colorado y deseable.
“Debo estar enloqueciendo...” tomo a Ichigo del cuello de su kimono y lo besó.
Ichigo al principio estaba sorprendido, nunca espero eso del pelirrojo. Pero las caricias en sus orejas lo hacían perder cualquier objeción que pudo decir. Se aferro fuerte de las ropas de Renji. Aún cuando sabía cómo besar, nunca lo había hecho con alguien que en verdad le gustara. Solo había sido besado antes por Urahara...
Eso lo hizo separarse de Renji.
“¿Qué pasa?”
Ichigo sentía el cuerpo arder. No podía contarle eso a Renji.
“Nada... yo... quería decirte algo antes: me gustás.” La cola de Ichigo se ladeo nerviosamente de un lado a otro. La inocencia del chico gato era refrescante.
“Nunca hiciste esto antes.” Dijo Renji. No era una pregunta, era una observación “Yo nunca antes estuve con uno de tu raza, pero quiero saber algo primero: ¿es verdad que sólo se cruzan porque están en celo?”
“Para los salvajes, creo que debe funcionar así.” Viendo la mirada intrigada de Renji, Ichigo procedió “Mi madre era humana, así que, soy mtad humano... tengo más ‘actitudes’ humanas, y aún cuando se fuera salvaje, creo que el ‘amor’ es algo que tiene que estar presente...”
Ichigo no estaba seguro de sus palabras, porque no estaba seguro de sus sentimientos o cómo expresarlos. Le gustaba Renji, y su corazón latía veloz cuando lo miraba. Un tibio sentimiento se elevaba en su pecho y algo como mariposas se revoloteaban en su panza.... nunca antes había sentido este tipo de amor: un amor que lo hacía desear otra persona.
Renji movió las manos, retirando la parte superior del kimono de Ichigo. La blanca piel estaba coloreada por un lindo rubor rosa. Su mano herida acarició los rasgos de Ichigo desde la cintura hasta su cara. Sus dedos siguieron las facciones jóvenes del gatito, deteniéndose en su boca. Ichigo tomó la mano y lamio nuevamente las heridas, finalmente cerrándolas y dejando la piel como nueva. Miró a Renji de nuevo, sus ojos llenos de deseo. Decidió acercarse para oler el aroma de la piel Renji y probar el resto de su ardiente carne contra la suya.
Ichigo ronroneó, algo que Renji encontró muy tierno. Con unos sacudones, Ichigo le quitó la parte superior del uniforme a Renji, y se maravilló cuando sus ojos se posaron en los diseños de tinta sobre la piel del pelirrojo. Le hizo recordar las marcas del tigre y las acarició. La mano de Ichigo llegó al vendaje del hombro y también lo retiró. La herida era más profunda, y debía haberle dolido. Ichigo deseó haber estado allí y haberse encargado del Hollow él mismo, por haber tocado al hombre que estaba frente suyo. Lamió y limpió la mordida, curando la herida. Renji sintió la tibia lengua en su hombro y se sintió excitado por ese contacto. Era suave, no como la de un gato y pensó que, si no fuera así, tal vez no le resultaría tan placentero. Soltó el obi (2) y quito las ropas inferiores del kimono de Ichigo, dejándolo desnudo. El chico gato cerró los ojos, era tan vergonzoso, ¡aunque lo deseaba tanto! Los brazos de Renji lo levantaron, y él se aferró de Renji casi con desesperación, y lo miró. La aceptación que halló en esos ojos, encendidos en pasión por él, era lo suficiente para despejar sus miedos. Entonces, Ichigo besó a Renji.
1-significa “pico de la luna”, y es donde vivía Kaho Mitsuki en el manga original de Card Captor sakura. Me gusto como sonaba, por eso lo elegí.
2- Obi es el lazo que se usa para asegurar los kimonos y va en la cintura.
La flor de la luz de la luna
Escrito por: Maru de Kusanagi
Disclaimer: Bleach y todos sus personajes no me pertenecen. Ojala fueran míos. Esto está escrito por una fan para otros fans, y no pretende ofender a nadie.
Advertencias del capítulo: yaoi, parejas extrañas, flurry, universo alternativo y escritora loca. Acento rioplatense.
Parejas: principalmente Renji/Ichigo, pero habrán más (irán apareciendo a lo largo de los capítulos, si leyeron la versión en inglés, ya deben saber).
Clasificación:M (habrá lemons).
Nota: regresamos al tiempo presente. Acá seguimos la línea temporal y vemos que pasa cuando Renji e Ichigo se reencuentran. Por cierto, en esta historia, Karakura, Soul Society/Seireitei y Rukongai son lugares en un mismo plano de existencia. O sea, esta Soul Society, que es rodeada por Rukongai y después esta Karakura, sin separación de planos espirituales.
~Terminología para esta historia~
Semi-humano: una persona mitad animal, como los nekobito.
Neko: gato en japonés.
Nekobito: significaría algo así como “persona gato”, y es la unión de las palabras japonesas “neko” y “hito” (persona), y es una palabra que inventé.
***=^..^=***
CAPÍTULO 5:
Otro día se levanto sobre Karakura. Cazar Hollows era parte de su tarea como shinigami, y normalmente Renji disfrutaba gastar su energía extra en esta actividad, especialmente cuando le evitaba el papeleo. Sin embargo, esta vez no tenía ganas. Haber dejado al gatito naranja solo en casa lo ponía de mal humor.
“¡Despertate!· dijo Rukia, dándole un golpe en la cabeza “¿Qué te pasa hoy? Estar todo melancólico no te es normal...”
“Perdón, me parece que estoy aburrido...”
“¿Porque no podes estar en casa con el minino?”
“¿Qué-? Cállate.”
“Decime, ¿ya hiciste algo con él?”
“¿Qué? ¡No te voy a contar eso!” Renji sintió un rubor inesperado.
“¡Así que si!”
“¡No! Digo, no te voy a decir nada porque sé qué vas a hacer con la información.”
“Dale, ¿hace cuanto nos conocemos? Puedo guardar un secreto.”
“Sí, sólo para compartirlo con las locas de la Asociación de Mujeres Shinigami.”
Rukia rezongó, “Sos malo.”
“Si, si.”
Sus celulares sonaron al fin, y Renji estaba agradecido por ello.
Karakura era un pueblo en las afueras de la Soul Society. Estaba mayormente poblado por shinigamis retirados o despedidos (como Urahara), humanos (como Masaki) y semi-humanos (los nekobito, como Ichigo, Toushirou e Ishida, eran una de las razas clasificadas en esta clase-sí, ¡van a haber más!). Por estas razones, proteger Karakura era un trabajo muy importante.
“Pero, ¿sabés?” dijo Rukia mientras caminaban al punto que indicaba el mensaje “a Ichigo en verdad le gustas. Usualmente es muy salvaje y arisco, solamente s ele acerca a la gente por el trabajo, y nunca comparte nade personal. Siempre lo vi como un chico muy solitario, aun cuando siempre está con su hermano.”
“¿Te referís al gato blanco?” la imagen de los filosos ojos verdes, brillando con un aura fría, vino a la mente de Renji.
“Ah. ¿lo conociste?” observo ella y el solo gruñó “Ése es Toushirou, y es un nekobito, como Ichigo. Pero él eligió vivir el resto de su vida como un gato. También escuche que es mayor que Ichigo.”
Llegaron a un lugar del bosque donde se abría un claro. Había pruebas de una vieja construcción humana, derruida por el tiempo. Algunas aves cantaron en las ramas, anunciando la aparición de los extraños.
“¿Qué dice la información?”
“Dice que es acá.”
Renji desenvaino sus zanpakutou, pero algo no estaba bien. En lugares como este donde no había ni un alma cerca merodeaba, ¿por qué un Hollow iba a aparecer ahí?
“Creo que hay un viejo templo por allá.” Apuntó Rukia tras los arboles “Siento que hay algo ahí.”
“Vamos.”
Caminaron con los sentidos alertas hasta que llegaron a la estructura de piedra de un templo shinto. En la puerta de entrada se leía Tskumine (1). Hierba salvaje cubría casi todo el suelo, pero dentro del lugar esta sorprendentemente limpio.
“Alguien vive acá.” Indico Renji “Tal vez eso es lo buscan los Hollows.”
Renji vio movimientos en las sombras, algo se agazapaba en la oscuridad. Hizo shunpo y atrapó a la criatura que chillaba y se resistía para liberarse. Le llevo a la luz: era pequeño y se veía humano.
“¿Qué encontraste?” se acerco Rukia “Un salvaje...” dijo, viendo con curiosidad al pequeño niño que había atrapado Renji. Era un nekobito salvaje, atigrado gris en la cola y las orejas, y unas ropas desgarradas cubrían su desnudez.
“¿Qué hacemos? Todos los salvajes deben ser entregados.”
El niño pataleó, pateando y rasguñando. Rukia sintió lastima por él.
“Nuestra misión es atrapar el Hollow, no gatos salvajes.”
“Tenés razón.” entonces, una energía emanó del gatito. En un movimiento extraordinariamente veloz, el nekobito mordió fuerte la mano de Renji, haciéndole sangrar. Esto lo tomo por sorpresa, y por ello lo soltó.
“¡Pendejo de mierda!” su mano sangraba profusamente.
“¡Renji, cuidado!”
El pequeño nekobito los miro con ojos ardientes de odio. Una aura maligna se elevaba de él, estaba poseído. Su forma cambio, con las piernas y brazos alargándose. Su rostro cambió completamente a unos monstruoso con grandes dientes y colmillos largos. Entonces, apareció la máscara.
“¡El Hollow se estaba ocultando en el cuerpo de ese chico!” dijo Rukia, sorprendida “Pero, ¿por qué?”
“Estúpidos shinigamis...·”aulló el Hollow “Metiéndose con mi caza... casi lo agarro...”
Era pequeño, pero muy rápido. Dentro del templo, esa cosa se escondió en las sombras, y apareció en las espaldas de Renji, y le mordió el hombro derecho.
“Bastardo” Renji trato de aferrar a Zabimaru, pero la mano le dolía y la sangre hacia la empuñadura resbalársele.
Rukia le atacó, tumbando en el proceso una de las viejas paredes del templo.
Renji se levantó, pero un movimiento en su espalda le llamo la atención. Fue solo un segundo, y cuando trato de enfocarlo, ya había desaparecido. El ruido de la lucha le hizo ir al lado de Rukia.
“¿Estás bien?” le pregunto ella.
“Sí... no sé por qué me sangra tanto la mano...”
“Debe ser la saliva del gato, funciona como un anticoagulante en ciertos casos, como la mordida de un murciélago.”
Rukia saltó y finalmente corto la cabeza del Hollow. Después de esto, fue al lado de Renji y le vendo la mano herida.
“¿Cómo pudiste bajar la guardia así?”
“Hey, ¡no me dijiste que podían hacer esto!”
“¡Es sentido común! Nunca debes bajar la guardia, aún ante un niño que parece inocente.”
“No estás ayudando, ¿sabías?”
Rukia termino de vendar sus heridas. “Debemos ir donde le escuadrón cuatro, ellos van a saber qué hacer.” Y, tal vez, descubramos porque un Hollow aparecería en un lugar desierto como éste.
****=^..^=****
“¡Shirooooooooooooooooooooooooo-chan!”
Momo abrazo al gato blanco contra su cara.
“¡Soltame!” grito el gato, luchando por soltarse.
“¡Te extrañe!” dijo Momo, ignorando sus reclamos.
“¡Che! ¡Te dije que me sueltes!”
A Toushirou le gustaba esa chica, aunque nunca iba a admitirlo. Momo era alguien que actuaba sin pensar, pero era demasiado “tocadora”. Toushirou se sentía a salvo cuando Momo lo abrazaba, le hacía recordar a alguien de su vida pasada. Tristemente, las similitudes entre esas dos personas terminaban ahí.
Momo lo abrazo extra fuerte una última vez antes de soltarlo.
“Momo-chan, que linda sorpresa.” Dijo Urahara con su usual cara adormilada.
“Hola, Urahara-san,” Ella se inclinó “¿está Ichigo?”
“Sí, está adentro, hoy no fue a lo de Abarai-san porque no se sentía bien.”
“¿Está enfermo?”
“Nah. Está en el comedor.”
En realidad, Ichigo no quiso ir porque extrañaba a Renji, e ir ahí solo lo iba a deprimir más. Después de conocer al gato negro en lo de Kuchiki, sentía más la necesidad de estar con el pelirrojo. Y eso lo estaba matando.
“¡Dale Ichi! ¡Parecía que el mundo estuviera por terminársete!” dijo Yoruichi al chico “Momo vino y te quiere hablar.”
“No tengo ganas.” Dijo él, dándole la espalda. Ella lo pateó.
“¡Momo, dice que te va a ver!”
Ichigo se volvió a ver a la mujer morena con ira. Momo entonces apareció con su amplia sonrisa, y segundos después fue seguida por la silenciosa figura de Toushirou.
“Hola Ichigo-kun. ¿Te sentís mejor?”
Ichigo se sentó derecho y se rascó detrás de la oreja.
“Sí.”
“¡Bien! Rukia me mandó a decirte que Renji volvió,” los ojos de Ichigo se iluminaron, haciendo que Yoruichi se riera por la bajo y a Toushirou gruñir. Ichigo, viéndose descubierto, bajo la cabeza y se ruborizó “pero ahora está en la división medica...”
“¡¿Qué!” casi grito Ichigo “¿Por qué? ¿Qué le pasó?”
“Sólo unas lastimaduras que no son nada graves, pero ella pensó que era lo mejor era... decirte...” y estaba en lo correcto, pensó Momo para sus adentros.
Ichigo se levantó, ¡necesitaba verlo!
“Gracias, Momo. ¡Urahara-san!”
“¿Qué? No hagas tanto ruido.” Dijo el dueño de la tienda.
“Debo ir a la división medica.”
“¿Qué? ¿Por qué?”
“Yo... ¡necesito algo!
Urahara lo miró. El chico gato estaba todo colorado y emocionado, mostrando una emoción más que su usual soledad y rezongo crónico en la cara. Era un buen cambio.
“Vas a limpiar el baño por una semana.”
“¡Gracias! ¡Vamos, Momo!”
“¡Sí!”
“¡Espérenme!” grito Toushiro, saltando y agarrándose del hombro de Ichigo. Los tres pronto desaparecieron.
“¿Le vas a dejar irse así nada más?”
Yoruichi se sentó frente a Urahara en su forma gatuna.
“Bueno, los chicos crecen.”
“¿Aunque te estés muriendo de ser el dueño de su cariño.”
Urahara no respondió a esto.
Llegaron a la División Medica (las barracas del Escuadrón Cuatro) justo para ver a Renji salir con Rukia. Ichigo se detuvo a unos pasos frente al pelirrojo. De pronto, no sabía qué decirle. Estaba preocupado y feliz de verlo sin mayores heridas, pero no podía decir nada de esto porque se dio cuenta que él y Renji no eran nada más que un cliente y su sirviente. Y eso le dolía.
“¡Hola Ichigo!” dijo Rukia al gato naranja “Parece que Momo llevo mi mensaje a tiempo.”
Viendo que Renji no iba a hacer nada, ella puso su mano en el hombro lastimado, haciéndolo gritar de dolor.
“¡Abarai -san! ¿Está bien?” dijo Ichigo, al fin acercándose.
“Si, solo me duele un poco...”
“Así que está vivo. Qué buena suerte tenemos...” siseó Toushirou, saltando del hombro de Ichigo. Renji le clavo los ojos al gato.
“Ne, Momo, ¿querés ir a tomar algo?” pregunto Rukia “Tengo que escribir el reporte y necesito ayuda. Podés traer a Shirou-chan.”
“¡Es Toushirou!” grito el gato blanco. Las dos lo ignoraron.
“¡Excelente! Pero, ¿y ellos”
“Ichigo puede acompañar a Renji a su casa, ya que Unohana-taicho le dio dos días de reposo.” Respondió Rukia con la misma inocencia fingida.
“¡Ok! Vamos, Shirou-chan.” Dijo Momo, agarrando al gato.
“Hey, ¡déjenme! ¡¿Quién dijo que iba a ir con ustedes?!”
Las dos los dejaron, llevándose al sobre protector gato con ellas.
Ichigo camino con Renji hasta su casa, y entonces preparo algo de té. Renji se sentó en la mesa del comedor y admiro cuan limpio estaba todo. Era muy distinto al lugar que había dejado hacia unos días.
“Aquí tienes.” Ichigo sirvió el té.
“Gracias. Hey, ¡este lugar se ve genial! Hiciste un gran trabajo.”
Ichigo se sintió orgulloso y un ruborcito le pinto las mejillas.
“Gracias.”
Ichigo notó que Renji tenía problemas con sostener la taza y decidió ayudar.
“¿Puedo?”
“Sí.”
Ichigo retiro los vendajes con cuidado hasta que la herida estuvo al descubierto. Las marcas de los dientes eran visibles y las heridas no habían cerrado todavía. Ichigo sintió el calor de la fuerte y callosa mano en la suya, era una mano muy acostumbrada a la lucha. También notó que era más grande que la suya “Creía que los shinigami se curaban rápido.”
“Fue un nekobito.” Oyendo esto, las orejas de Ichigo se levantaron, mostrando que estaba interesado en el tema “Un Hollow se estaba escondiendo dentro del cuerpo de uno muy joven... Unohana-taicho dijo que la saliva retrasa la curación. Pero no se detiene ahí, afecta todas la heridas que el cuerpo tenga hasta que su efecto pase. Esa mordida de Hollow tampoco se cura.”
“Hay solo un antídoto para esto...” Ichigo se ruborizo más fuerte “si me dejas...”
Renji lo miro al gato a los ojos y le dejo hacer. Ichigo llevo la mano a su cara y la lamió.
“¡¿Qué estás haciendo?!” Renji recupero su mano. Ichigo bajo las orejas, sintiéndose avergonzado.
“Cuando... cuando uno de mi clase, un nekobito, muerde a alguien en una manera defensiva, su saliva tiene el efecto anticoagulante en la herida; es una forma de defensa y también una herramienta de caza y muerte. Pero también sirve como un bálsamo curativo si ese es el deseo del gato. Puede dar un efecto de neutralización a una herida hecha por otro nekobito...”
“Ya veo...” Renji miró su mano, donde Ichigo la había lamido ya estaba curándose “Es como un tipo de kidou.”
Ichigo espero con ansiedad ver qué hacia Renji. Renji observó al chico, todo colorado y deseable.
“Debo estar enloqueciendo...” tomo a Ichigo del cuello de su kimono y lo besó.
Ichigo al principio estaba sorprendido, nunca espero eso del pelirrojo. Pero las caricias en sus orejas lo hacían perder cualquier objeción que pudo decir. Se aferro fuerte de las ropas de Renji. Aún cuando sabía cómo besar, nunca lo había hecho con alguien que en verdad le gustara. Solo había sido besado antes por Urahara...
Eso lo hizo separarse de Renji.
“¿Qué pasa?”
Ichigo sentía el cuerpo arder. No podía contarle eso a Renji.
“Nada... yo... quería decirte algo antes: me gustás.” La cola de Ichigo se ladeo nerviosamente de un lado a otro. La inocencia del chico gato era refrescante.
“Nunca hiciste esto antes.” Dijo Renji. No era una pregunta, era una observación “Yo nunca antes estuve con uno de tu raza, pero quiero saber algo primero: ¿es verdad que sólo se cruzan porque están en celo?”
“Para los salvajes, creo que debe funcionar así.” Viendo la mirada intrigada de Renji, Ichigo procedió “Mi madre era humana, así que, soy mtad humano... tengo más ‘actitudes’ humanas, y aún cuando se fuera salvaje, creo que el ‘amor’ es algo que tiene que estar presente...”
Ichigo no estaba seguro de sus palabras, porque no estaba seguro de sus sentimientos o cómo expresarlos. Le gustaba Renji, y su corazón latía veloz cuando lo miraba. Un tibio sentimiento se elevaba en su pecho y algo como mariposas se revoloteaban en su panza.... nunca antes había sentido este tipo de amor: un amor que lo hacía desear otra persona.
Renji movió las manos, retirando la parte superior del kimono de Ichigo. La blanca piel estaba coloreada por un lindo rubor rosa. Su mano herida acarició los rasgos de Ichigo desde la cintura hasta su cara. Sus dedos siguieron las facciones jóvenes del gatito, deteniéndose en su boca. Ichigo tomó la mano y lamio nuevamente las heridas, finalmente cerrándolas y dejando la piel como nueva. Miró a Renji de nuevo, sus ojos llenos de deseo. Decidió acercarse para oler el aroma de la piel Renji y probar el resto de su ardiente carne contra la suya.
Ichigo ronroneó, algo que Renji encontró muy tierno. Con unos sacudones, Ichigo le quitó la parte superior del uniforme a Renji, y se maravilló cuando sus ojos se posaron en los diseños de tinta sobre la piel del pelirrojo. Le hizo recordar las marcas del tigre y las acarició. La mano de Ichigo llegó al vendaje del hombro y también lo retiró. La herida era más profunda, y debía haberle dolido. Ichigo deseó haber estado allí y haberse encargado del Hollow él mismo, por haber tocado al hombre que estaba frente suyo. Lamió y limpió la mordida, curando la herida. Renji sintió la tibia lengua en su hombro y se sintió excitado por ese contacto. Era suave, no como la de un gato y pensó que, si no fuera así, tal vez no le resultaría tan placentero. Soltó el obi (2) y quito las ropas inferiores del kimono de Ichigo, dejándolo desnudo. El chico gato cerró los ojos, era tan vergonzoso, ¡aunque lo deseaba tanto! Los brazos de Renji lo levantaron, y él se aferró de Renji casi con desesperación, y lo miró. La aceptación que halló en esos ojos, encendidos en pasión por él, era lo suficiente para despejar sus miedos. Entonces, Ichigo besó a Renji.
1-significa “pico de la luna”, y es donde vivía Kaho Mitsuki en el manga original de Card Captor sakura. Me gusto como sonaba, por eso lo elegí.
2- Obi es el lazo que se usa para asegurar los kimonos y va en la cintura.
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